El dato...
Hablar, escribir y entender perfectamente un idioma es una tarea no exenta de dificultades, y más cuando de lo que se trata es de aprender a utilizar correctamente los tiempos verbales, es decir, a conjugar los verbos.
Sin embargo, lo que antes era una labor a la que había que dedicarle horas y horas de aburrida memorización, y frustración por parte del docente ante los lentos avances de sus alumnos, ahora se puede convertir en un casi un juego gracias a las distintas aplicaciones y recursos que se pueden encontrar en Internet.
Los detalles...
Enseñar a los niños a utilizar los verbos con propiedad es una de las principales tareas de un profesor, pero también es una de las más arduas, porque, hasta ahora, el método estaba basado en las viejas cartillas, en las que la repetición era la constante para el aprendizaje.
Esta antigua metodología ha quedado obsoleta, más que nada porque los alumnos de primaria desde que nacieron han estado rodeados de tecnología y su forma de entender la enseñanza y el aprendizaje es claramente diferente a la de sus padres y abuelos.
Conseguir la atención de los niños es posible gracias a distintas herramientas. Una de ellas son los juegos de carácter educativo, que pueden convertir la clase de lengua en la más divertida del curso. Algunos de ellos son:
- Pasapalabra. A imitación del conocido programa de televisión, este juego propone un “rosco” de las letras del abecedario sobre las que debe pinchar el jugador para responder a una pregunta sobre una forma verbal y un verbo que comienza con esa inicial. Si el alumno se equivoca, puede probar de nuevo hasta acertar.
- Sopa de letras. En este juego, los alumnos deberán encontrar varias formas verbales y resaltarlas.
- Formas verbales. Planteado como un crucigrama, los alumnos han de escribir el verbo en la persona, número y tiempo del indicativo solicitados. Permite saltarse aquellas formas verbales que no se conocen y regresar en otro momento.
- Los verbos. Más complicado que los anteriores. En esta propuesta se combinan varios modos de practicar la conjugación de verbos. La primera de ellas pide a los jugadores que destaquen cuál es el verbo en diferentes enunciados; la segunda propone un verbo conjugado y los niños han de seleccionar la conjugación y el tiempo verbal adecuados, siempre en modo indicativo; la tercera añade al anterior los modos subjuntivos, imperativo y formas no personales; y, por último, en la cuarta hay que señalar de nuevo todos los verbos, en este caso, de un texto.
Además de estos juegos online, existen varias aplicaciones que pueden descargarse tanto en smartphone como en tablets. Algunas de las existentes son:
- VerbForms. Contiene hasta 7.000 verbos, de los que se puede crear listas, realizar ejercicios y almacenar los fallos cometidos para repasarlos. Es posible programar ejercicios y permite el acceso a diccionarios online para resolver dudas. Está disponible para iPhone, iPod Touch e iPad.
- Conjugador de verbos. Conjuga verbos regulares, irregulares y reflexivos, según las normas de la Real Academia Española. Incluye técnicas para recordar los verbos. Es gratuita para Android.
Además de utilizar estas aplicaciones en el aula, se conforman como una alternativa para planificar deberes a desarrollar fuera de clase. En vez de jugar al Angry Birds, los alumnos pueden coger los teléfonos móviles de sus padres para aprender a usar los verbos.
Todas estas herramientas son también muy útiles para aquellos estudiantes extranjeros que estén aprendiendo castellano.
Y entonces...
La tecnología avanza rápidamente. Mucho más de lo que adapta el sistema educativo sus metodologías y herramientas a la realidad de sus alumnos. No sólo es cómodo y rentable (la mayoría de estos recursos son gratuitos), sino que además es efectivo en la consecución de los objetivos. Y, en este caso, el objetivo es conseguir que los alumnos aprendan a conjugar los verbos sin que ello suponga un esfuerzo titánico que les haga perder el interés por lo que se enseña en clase. La oportunidad está ya en la red.